Esta tarde-noche nos ha invadido la tristeza. La dura noticia se hacía eco en la Hermandad.
Una familia y amigos de nuestra Hermandad perdían a la pequeña Yanira; una angelita de pocas semanas de vida y que hoy recibía su bautismo.
Un doloroso y paralizante puñal se ha clavado retorcidamente en el corazón de esta familia. Y un poco en el de todos y todas.
En este momento mostramos nuestro mayor respeto, y muy sentido pésame ante tan triste acontecimiento.
Deseamos que esta angelita que hoy nos ha dejado, se eleve a los cielos y cuide desde las alturas de todos nosotros. ¡ Qué sea un ángel de la guarda, una dulce compañía!.. qué no nos deja solos.
¡Qué Ntro. P. Jesús Nazareno la recoja en su seno!, y brille para ella la luz eterna de la Esperanza en la Resurrección.