Continuamos compilando y recogiendo imágenes para nuestro archivo histórico que ya suma algún millar de fotos, y que esperamos pronto puedan ver la luz.
En esta ocasión os avanzamos unas imágenes de la Procesión del Viernes Santo de 2012.
El año 2012, entre otras muchas cosas, fue un año marcado en la ciudad por el gran efecto de la crisis económica iniciada al 2008, con gran destrucción de trabajo de muchas personas que se dedicaban a la construcción, servicios, y muchos hermanos y hermanas tenían grandes dificultades. Aquel año la Hermandad, junto al resto de cofradías, participó de numerosas acciones de solidaridad.
A nivel cofrade, el 2012 se inició con la adquisición de una túnica para el Nazareno. Era un proyecto que se seguía hacía años y, a pesar de las dificultades, numerosas personas participaron para su adquisición con motivo del XXV aniversario fundacional de la Hermandad.
A pesar de se un año dónde la Comissió de Setmana Santa anunciaba austeridad para las cofradías durante ese curso, la ciudad de Mataró fue una explosión de actos y actividades en momentos dónde muchas personas se aferraban a la fe para superar sus dificultades.
Aquél año fue el último de Hermano Mayor de Javier Lechuga, que pasaría la vara a Isabel Noé el 11 de noviembre.
De aquel año destaca también la intervención de Jordi Merino en el Pleno Municipal después de ser propuesta la Semana Santa de Mataró como Patrimoni Cultural, en una semana algo movida por la procesión del Silencio dónde participaron los antiguos legionarios y generó un gran revuelo mediático a nivel catalán. Días antes se firmaba un convenio para fomentar la Semana Santa en la ciudad.
El pregonero de aquella Semana Santa fue Domingo de la Ossa, de la Asociación Cultural Vírgen de las Maravillas. De manera excepcional Ventura Santana presentó la Matinal de Saetas que lució un día espectacular y tremendamente concurrido. Los capataces fueron Iván Romero para el paso de trono de Jesús, y se iniciaba Mario García en el paso de Palio de la Ntra. Sra. de la Esperanza.
El Jueves Santo ofreció una procesión que se inició ya empezada la noche, pero con una gran participación, también con la presencia de la Cofradía Salesiana de la Verónica.
La Procesión del Viernes Santo
El viernes amaneció lloviendo y todo eran incertidumbres. La Comissió de Setmana Santa aún no tenía el actual protocolo de lluvia . A mediodía se anunciaba, después de la reunión de todas las cofradías, que la procesión se realizaría.
Las dos cuadrillas y la banda de la Hermandad inmortalizaron una imagen que presidió redes sociales muchos meses a puertas de Capuchinas.
Eran años dónde aún se congregaban todos los pasos en la plaza de Santa María y toda la Hermandad se concentraba en la parte final, después de llegar de Capuchinas.
