Cerdañola es sin lugar a dudas, desde un punto de vista cristiano, un barrio Mariano. Hay una gran devoción a la Virgen María en muchas de sus advocaciones y formas, Auxiliadora, Maravillas, Inmaculada... pero durante Semana Santa, María es Madre de toda Esperanza.
Este año la Esperanza ha presentado un nuevo caminar. Los portadores y portadoras de Esperanza han elevado el paso de Palio, han puesto elegancia, buen hacer, y dado importancia a la Reina de los Cielos. Por eso motivo han sido sus pies des de dentro de las trabajaderas. Un estilo que inicialmente se presentaba como arduo, complicado y difícil, pero que ha sido un antes y un después. Un estilo que ha iniciado una senda considerable ya que ha sido aclamado por parte del público asistente.
Muchas personas se ha fijado en su rostro, en esa búsqueda de Esperanza antes las cruces de la vida. Muestra de ello ha sido la verdadera fiesta cultural y de fe en torno a ella por las calles.
Vista detrás del Paso de la Esperanza por las calles de Cerdanyola |
Otros momentos del Jueves Santo: